31 de mayo de 2022

 FARO DE EILEAN MOR:

Islas de Flannan, en las Hébridas, costa escocesa.

Faro Eilean mor
Se construyó el faro en 1899.

La noche del 26 de diciembre de 1900,un pequeño barco se adentraba en las Islas Flannan de las Hébridas rumbo una pequeñísima isla: Eilean Mor. Las únicas personas que la habitan son los guardianes del faro. Si bien es cierto que en la actualidad los faros están automatizados, hasta no hace mucho en esta isla solían haber tres fareros, tres personas que solían trabajar durante varias semanas seguidas, para después ser sustituidos por un equipo nuevo.

Eso es lo que se pretendía hacer esa noche.

Donald mcarthur, thomas marshall, james ducat

Sustituir a Thomas Marshall, el segundo ayudante, A James Ducatel guardián Principal, y a William MacArthur, el tercer asistente. En aquella ocasión esos tres hombres serían devueltos a sus casas para dejar en la isla a un sólo hombre, a Joseph Moore. Cuando el capitán del barco James Harvey llegó a tierra junto con Joseph hicieron sonar la bocina de llegada y además, lanzaron una bengala. Pero no obtuvieron respuesta. Y aquello no era normal. Así pues, no dudaron en ponerse los impermeables y hacer frente a una larga caminata para llegar hasta el faro.

No había ni rastro de los tres guardianes del faro. La mesa estaba aún dispuesta para una cena que nunca terminaron, y los relojes, absolutamente todos los relojes del faro de se habían detenido. Algo malo había ocurrido…Llamaron por radio a comandancia y a seguridad civil para anunciar de la desaparición de los 3 hombres, quedándose aquella noche para aguardar refuerzos al día siguiente.

La persona destinada a llevar a cabo las investigaciones fue Robert Muirhead, policía y, además, amigo de aquellos tres hombres. Lo primero que hizo fue leer el registro de actividad del faro, las notas que los guardianes dejaban reflejado a modo de diario personal, donde se registraba todo aquello curioso que acontecía en el mar o en la isla. La última entrada fue del 12 de diciembre, donde Thomas Marshall, escribió: “tenemos vientos severos, nunca antes había visto algo así. Es terrible. MacArthur, el tercer asistente, no para de llorar”.

Aquello era realmente extraño, puesto que todos los que conocían a McArthur sabían que además de farero, era un navegante experimentado, y un valentón de las tabernas, entonces ¿por qué estaría llorando por una tormenta y unos vientos fuertes?

Nadie pudo obtener pistas. Lo único que tenían era un faro solitario, relojes detenidos a la hora de la cena, una silla volcada y lámparas de petróleo consumidas. Ni rastro de los tres guardianes. Así pues, lo que esperaban es que los próximos días el mar trajera sus cuerpos, porque una de las posibilidades es que hubieran perecido en la tormenta o en esos vientos de los que hablaban. No obstante, el mar nunca trajo ningún cuerpo, ninguna pista. Nunca se supo nada…

Ahora bien, los siguientes guardianes que ocuparon el faro de Eilean Mor, siempre tuvieron clara una cosa: que Thomas Marshall, James Ducat y William McArthur estaban muertos. ¿La razón? Porque sus fantasmas, sus espíritus seguían en el faro. Tres sombras oscuras que aparecían y desaparecían. Tres corrientes frías que erizaban la piel en noches de tormenta, tres presencias silenciosas que hacían imposible poder pasar más de un día en Eilean Mor, tanto era así, que muchos quedaron aliviados el día en que, por fin, las labores del faro quedaron mecanizadas por un ordenador.

Nadie fue capaz ni una sola vez de enfrentarse a esas tres “supuestas” sombras y preguntarles qué les había ocurrido, cuál había sido su terrible final. 



 AERÓDROMO DE MONTROSE:

En escocia.

El Primer aeródromo militar de operaciones de Gran Bretaña se creó en 1913. Desde los primeros días de la aviación militar y en las dos guerras mundiales, el aeródromo de Montrose ha jugado un papel vital en la formación de pilotos de la Royal Flying Corps y el Royal Air Force.  

La formación de pilotos era una ocupación peligrosa y muchos perdieron sus vidas y están enterrados en los cementerios de Montrose. No es de extrañar, pues, que sea el lugar más embrujado de Gran Bretaña. En él ha habido muchos avistamientos inexplicables de apariciones vestidas con los uniformes de pilotos y aviones fantasma.

Uno en particular es el del teniente Arthur Desmond, cuya prematura muerte en 1913, le convirtió en el primer fantasma de Montrose. Obtuvo su certificado Real Aero Club en junio de 1912 y fue asesinado en mayo de 1913, cuando el biplano BE2 estaba volando sobre Montrose en Escocia. Todo apuntaba a que fue un accidente de vuelo, pero años más tarde se comprobó que no fue así.

El ala rota y doblada lanzó el biplano poco a poco en una serie de sacudidas convulsivas. Los giros incontrolables desabrocharon al piloto del cinturón de seguridad y su cuerpo fue a estrellarse a gran velocidad contra el duro suelo, ya que en 1913 no se usaban paracaídas.

El Comité de Investigación de Accidentes encontró que el ala se había derrumbado a causa de una reparación defectuosa llevada a cabo sobre el terreno por un desconocido. El incidente y la muerte del teniente Arthur Desmond a ojos de todo el mundo había sido una negligencia suya mientras volaba.

Una tarde del otoño de 1916, el Mayor Cyril Foggin vio a un oficial vestido con el traje, casco de cuero y gafas de piloto caminando delante de él, hacia la puerta del barracón. Cuando el comandante llegó a la puerta, que estaba cerrada entró y vio que el otro oficial no estaba allí. Era imposible que hubiera podido salir del camino principal sin darse cuenta. Foggin después trató de razonar la aparición pensando que quizás lo que vio fue debido a la fatiga visual o la imaginación, pero sabía que había visto a alguien … que había desaparecido de una manera que ningún ser humano podía hacer.

Algunos días más tarde, Foggin volvió a ver al piloto misterioso de nuevo caminando hacia el barracón y desaparecer al llegar a la puerta. Esta vez estaba totalmente seguro de haberlo visto desaparecer, pero claro, si contaba esto podía costarle su puesto alegando ser víctimas de un colapso nervioso o alucinación. Por lo tanto, no le dijo a nadie lo que había visto, y lo que vio una tercera y una cuarta vez …  

La aparición del teniente Arthur Desmond dejó de verse un año más tarde en 1917 cuando salió a la luz el expediente en el que se exoneraba a Desmond de cualquier culpabilidad en el accidente y se atribuía éste a la reparación defectuosa del ala de su biplano BE2.

El 27 de mayo de 1963, cincuenta años después de la muerte de Arthur, Sir Peter Massfield vio en pleno vuelo, cómo se acercaba un bimotor de principios de siglo, con un pálido piloto, vestido acorde, y pensó que era un aficionado a los aviones antiguos. Para su sorpresa, el avión se desplomó. Massfield aterrizó en un campo de golf cercano para pedir ayuda. Cuando acudió al lugar junto con algunos golfistas, el avión accidentado y su piloto, habían desaparecido.

El aeródromo ha sido desde su creación una fuente de avistamientos paranormales y sonidos durante casi un siglo. Convertido hoy en un museo trae de cabeza a los voluntarios del mismo intentando obtener una explicación racional a tan extraños fenómenos.

Una de las atracciones en el museo es una recreación de una habitación de 1940 en la que se ha podido escuchar en una vieja radio Pye de entonces antiguas emisiones de la segunda guerra mundial sin que ésta estuviera conectada a la red. Numerosos testimonios aseguran haber escuchado la música de Glenn Miller seguida de los discursos de Winston ChurchillUn visitante del museo estaba en los baños al lado de la habitación cuando escuchó la radio, al comentárselo a los voluntarios le dijeron que era imposible ya que no estaba enchufada todavía. Entre los testigos fiables que han escuchado la radio están Bob Sutherland, miembro del consejo del museo y su tesorero.

Los visitantes han informado también de extrañas “energías” en torno a la pista de aterrizaje, pisadas fantasmales, puertas que se abren y cierran, el sonido de los motores de los aviones, figuras sombrías entrando y saliendo de las habitaciones e incluso el avistamiento de un piloto en pleno vuelo de la primera guerra mundial.

 AERÓDROMO DE MONTROSE:

En escocia.

El Primer aeródromo militar de operaciones de Gran Bretaña se creó en 1913. Desde los primeros días de la aviación militar y en las dos guerras mundiales, el aeródromo de Montrose ha jugado un papel vital en la formación de pilotos de la Royal Flying Corps y el Royal Air Force.  

La formación de pilotos era una ocupación peligrosa y muchos perdieron sus vidas y están enterrados en los cementerios de Montrose. No es de extrañar, pues, que sea el lugar más embrujado de Gran Bretaña. En él ha habido muchos avistamientos inexplicables de apariciones vestidas con los uniformes de pilotos y aviones fantasma.

Uno en particular es el del teniente Arthur Desmond, cuya prematura muerte en 1913, le convirtió en el primer fantasma de Montrose. Obtuvo su certificado Real Aero Club en junio de 1912 y fue asesinado en mayo de 1913, cuando el biplano BE2 estaba volando sobre Montrose en Escocia. Todo apuntaba a que fue un accidente de vuelo, pero años más tarde se comprobó que no fue así.

El ala rota y doblada lanzó el biplano poco a poco en una serie de sacudidas convulsivas. Los giros incontrolables desabrocharon al piloto del cinturón de seguridad y su cuerpo fue a estrellarse a gran velocidad contra el duro suelo, ya que en 1913 no se usaban paracaídas.

El Comité de Investigación de Accidentes encontró que el ala se había derrumbado a causa de una reparación defectuosa llevada a cabo sobre el terreno por un desconocido. El incidente y la muerte del teniente Arthur Desmond a ojos de todo el mundo había sido una negligencia suya mientras volaba.

Una tarde del otoño de 1916, el Mayor Cyril Foggin vio a un oficial vestido con el traje, casco de cuero y gafas de piloto caminando delante de él, hacia la puerta del barracón. Cuando el comandante llegó a la puerta, que estaba cerrada entró y vio que el otro oficial no estaba allí. Era imposible que hubiera podido salir del camino principal sin darse cuenta. Foggin después trató de razonar la aparición pensando que quizás lo que vio fue debido a la fatiga visual o la imaginación, pero sabía que había visto a alguien … que había desaparecido de una manera que ningún ser humano podía hacer.

Algunos días más tarde, Foggin volvió a ver al piloto misterioso de nuevo caminando hacia el barracón y desaparecer al llegar a la puerta. Esta vez estaba totalmente seguro de haberlo visto desaparecer, pero claro, si contaba esto podía costarle su puesto alegando ser víctimas de un colapso nervioso o alucinación. Por lo tanto, no le dijo a nadie lo que había visto, y lo que vio una tercera y una cuarta vez …  

La aparición del teniente Arthur Desmond dejó de verse un año más tarde en 1917 cuando salió a la luz el expediente en el que se exoneraba a Desmond de cualquier culpabilidad en el accidente y se atribuía éste a la reparación defectuosa del ala de su biplano BE2.

El 27 de mayo de 1963, cincuenta años después de la muerte de Arthur, Sir Peter Massfield vio en pleno vuelo, cómo se acercaba un bimotor de principios de siglo, con un pálido piloto, vestido acorde, y pensó que era un aficionado a los aviones antiguos. Para su sorpresa, el avión se desplomó. Massfield aterrizó en un campo de golf cercano para pedir ayuda. Cuando acudió al lugar junto con algunos golfistas, el avión accidentado y su piloto, habían desaparecido.

El aeródromo ha sido desde su creación una fuente de avistamientos paranormales y sonidos durante casi un siglo. Convertido hoy en un museo trae de cabeza a los voluntarios del mismo intentando obtener una explicación racional a tan extraños fenómenos.

Una de las atracciones en el museo es una recreación de una habitación de 1940 en la que se ha podido escuchar en una vieja radio Pye de entonces antiguas emisiones de la segunda guerra mundial sin que ésta estuviera conectada a la red. Numerosos testimonios aseguran haber escuchado la música de Glenn Miller seguida de los discursos de Winston ChurchillUn visitante del museo estaba en los baños al lado de la habitación cuando escuchó la radio, al comentárselo a los voluntarios le dijeron que era imposible ya que no estaba enchufada todavía. Entre los testigos fiables que han escuchado la radio están Bob Sutherland, miembro del consejo del museo y su tesorero.

Los visitantes han informado también de extrañas “energías” en torno a la pista de aterrizaje, pisadas fantasmales, puertas que se abren y cierran, el sonido de los motores de los aviones, figuras sombrías entrando y saliendo de las habitaciones e incluso el avistamiento de un piloto en pleno vuelo de la primera guerra mundial.

30 de mayo de 2022

 CASTILLO DE FYVIE:

Situado en Fyvie, cerca de Turriff en Aberdeenshire, Escocia.

Fue construido en el siglo XIII por Robert Bruce como pabellón de caza, su propiedad pasó por 5 familias diferentes que fueron ampliándolo cada uno con una torre con su nombre por lo que el castillo consta de 5 de estas construcciones. Una de las familias que lo habitó fue la del famoso Lord Byron.

El legendario vidente Thomas Rhymer, maldijo en el siglo XIII a la estirpe de Fyvie diciendo que ningún heredero varón nacería dentro de los muros del castillo, y así fue durante 6 siglos.

El primero de los fantasmas que habita el castillo es el de Lady Meldrum que después de su muerte en el siglo XIII, su cuerpo fue sellado en la pared de un cuarto secreto ubicado en la Torre Meldrum tal y como ella había solicitado. Durante la renovación del castillo en 1920 unos obreros descubrieron sus restos. Desde ese día el castillo se ha visto afectado por ruidos extraños y sucesos inexplicables. El fantasma de Lady Meldrum fue vista con frecuencia a partir de entonces. Su fantasma se conoce hoy en día como la Dama Gris.

El espectro más famoso es el de Lady Lilias Drummond o la Dama de Verde, que en 1592 contrajo matrimonio con Lord Alexander Drummond Seton, la pareja tuvo cinco hijas en 9 años, aunque ningún heredero varón tal y como pronosticó Rhymer por lo que el matrimonio comenzó a tener problemas y Lord Drummond buscó consuelo en otros brazos, concretamente en los de Lady Grizel Leslie.

Lady Lilias muere consumida por la pena de la infidelidad de su marido el 8 de mayo de 1601, cuando contaba con solo 49 años de edad. Tan solo seis meses después de su fallecimiento el viudo contrae matrimonio con Lady Leslie, pero la tranquilidad les iba a durar poco porque la misma noche de bodas en la alcoba nupcial empezaron a escuchar una especie de suspiros femeninos sin que allí se encontrara nadie más que los recién casados. A la mañana siguiente se encontraron escritas desde el exterior en la ventana las palabras “D. Drummond Lilias”, mensaje que aún sigue sobre el cristal. A partir de entonces, Lord Drummond fue perseguido por el fantasma de una mujer que brilla en color verde.

Muchos son los que afirman haber visto la figura de Lady Lilias vagando por el castillo o reposando en la que fue su alcoba, paseos nocturnos arriba y abajo en la escalera se documentaron periódicamente a lo largo de los años, y cada relato cuenta el resplandor verdoso que la rodeaba. A veces, fue vista como un destello de luz al final del pasillo.

El coronel Cosmo Gordon, quinto señor de Gordon de Fyvie, que tenía el castillo desde 1847 hasta 1879, registró que fue sacudido de la cama por manos invisibles, mientras que otra noche, un viento se levantó en el interior del castillo cuando fuera todo estaba en silencio y se levantó la ropa de cama de él y varios invitados.

Los Gordons la consideraban un presagio de muerte, ya que varios miembros de la familia murieron después de haberla visto, la más reciente en 1925. Un oficial del ejército canadiense se había retirado a descansar y se quedó dormido. Algún tiempo después se despertó y encontró la luz encendida y se levantó para apagarla, pero en cambio se da cuenta que lo que hace es encenderla, vuelve a presionar el interruptor y la apaga, pero sigue habiendo luz en la habitación, la luz era cada vez más brillante. Él lo describió como pequeñas llamas que jugaban alrededor de los cuadros que colgaban en la sala, lo suficientemente brillante para ver los colores con claridad.

El mismo fenómeno se produjo cada noche hasta que se fue y aunque él no vio ninguna aparición, se sentía como si hubiera alguien en la habitación con él.

La biblioteca de la Fyvie Castle es una habitación bastante extraña, pequeña con áreas ocultas. Algunos grupos de investigación aseguran que aquí la temperatura es excesivamente baja con respecto al resto de habitaciones.

También está el fantasma del trompetista Andrew Lammie. En el siglo XVIII se enamoró de la hija del molinero local, llamada Agnes Smith. Por desgracia, los padres de Agnes no estaban de acuerdo con AndrewAl enterarse de que se reunían en secreto, el Lord se apoderó de Andrew y lo envió a las Indias Occidentales como un esclavo. Andrew se las arregló para escapar y regresar varios años después, pero ya era demasiado tarde, pues Agnes murió poco tiempo después de su partida. Fue entonces cuando Andrew juró que el sonido de una trompeta precedería siempre la muerte de cada terrateniente de Fyvie como un recordatorio de la terrible injusticia que había sufrido él.

Desde entonces, la trompeta se ha oído varias veces en el silencio de la noche antes de la muerte de cada uno de los terratenientes de Fyvie. En varias ocasiones, una oscura figura de un hombre alto, ha sido visto por los muros del castillo, pero desaparece cuando se acerca a ellos.



 CASTILLO DE FYVIE:

Situado en Fyvie, cerca de Turriff en Aberdeenshire, Escocia.

Fue construido en el siglo XIII por Robert Bruce como pabellón de caza, su propiedad pasó por 5 familias diferentes que fueron ampliándolo cada uno con una torre con su nombre por lo que el castillo consta de 5 de estas construcciones. Una de las familias que lo habitó fue la del famoso Lord Byron.

El legendario vidente Thomas Rhymer, maldijo en el siglo XIII a la estirpe de Fyvie diciendo que ningún heredero varón nacería dentro de los muros del castillo, y así fue durante 6 siglos.

El primero de los fantasmas que habita el castillo es el de Lady Meldrum que después de su muerte en el siglo XIII, su cuerpo fue sellado en la pared de un cuarto secreto ubicado en la Torre Meldrum tal y como ella había solicitado. Durante la renovación del castillo en 1920 unos obreros descubrieron sus restos. Desde ese día el castillo se ha visto afectado por ruidos extraños y sucesos inexplicables. El fantasma de Lady Meldrum fue vista con frecuencia a partir de entonces. Su fantasma se conoce hoy en día como la Dama Gris.

El espectro más famoso es el de Lady Lilias Drummond o la Dama de Verde, que en 1592 contrajo matrimonio con Lord Alexander Drummond Seton, la pareja tuvo cinco hijas en 9 años, aunque ningún heredero varón tal y como pronosticó Rhymer por lo que el matrimonio comenzó a tener problemas y Lord Drummond buscó consuelo en otros brazos, concretamente en los de Lady Grizel Leslie.

Lady Lilias muere consumida por la pena de la infidelidad de su marido el 8 de mayo de 1601, cuando contaba con solo 49 años de edad. Tan solo seis meses después de su fallecimiento el viudo contrae matrimonio con Lady Leslie, pero la tranquilidad les iba a durar poco porque la misma noche de bodas en la alcoba nupcial empezaron a escuchar una especie de suspiros femeninos sin que allí se encontrara nadie más que los recién casados. A la mañana siguiente se encontraron escritas desde el exterior en la ventana las palabras “D. Drummond Lilias”, mensaje que aún sigue sobre el cristal. A partir de entonces, Lord Drummond fue perseguido por el fantasma de una mujer que brilla en color verde.

Muchos son los que afirman haber visto la figura de Lady Lilias vagando por el castillo o reposando en la que fue su alcoba, paseos nocturnos arriba y abajo en la escalera se documentaron periódicamente a lo largo de los años, y cada relato cuenta el resplandor verdoso que la rodeaba. A veces, fue vista como un destello de luz al final del pasillo.

El coronel Cosmo Gordon, quinto señor de Gordon de Fyvie, que tenía el castillo desde 1847 hasta 1879, registró que fue sacudido de la cama por manos invisibles, mientras que otra noche, un viento se levantó en el interior del castillo cuando fuera todo estaba en silencio y se levantó la ropa de cama de él y varios invitados.

Los Gordons la consideraban un presagio de muerte, ya que varios miembros de la familia murieron después de haberla visto, la más reciente en 1925. Un oficial del ejército canadiense se había retirado a descansar y se quedó dormido. Algún tiempo después se despertó y encontró la luz encendida y se levantó para apagarla, pero en cambio se da cuenta que lo que hace es encenderla, vuelve a presionar el interruptor y la apaga, pero sigue habiendo luz en la habitación, la luz era cada vez más brillante. Él lo describió como pequeñas llamas que jugaban alrededor de los cuadros que colgaban en la sala, lo suficientemente brillante para ver los colores con claridad.

El mismo fenómeno se produjo cada noche hasta que se fue y aunque él no vio ninguna aparición, se sentía como si hubiera alguien en la habitación con él.

La biblioteca de la Fyvie Castle es una habitación bastante extraña, pequeña con áreas ocultas. Algunos grupos de investigación aseguran que aquí la temperatura es excesivamente baja con respecto al resto de habitaciones.

También está el fantasma del trompetista Andrew Lammie. En el siglo XVIII se enamoró de la hija del molinero local, llamada Agnes Smith. Por desgracia, los padres de Agnes no estaban de acuerdo con AndrewAl enterarse de que se reunían en secreto, el Lord se apoderó de Andrew y lo envió a las Indias Occidentales como un esclavo. Andrew se las arregló para escapar y regresar varios años después, pero ya era demasiado tarde, pues Agnes murió poco tiempo después de su partida. Fue entonces cuando Andrew juró que el sonido de una trompeta precedería siempre la muerte de cada terrateniente de Fyvie como un recordatorio de la terrible injusticia que había sufrido él.

Desde entonces, la trompeta se ha oído varias veces en el silencio de la noche antes de la muerte de cada uno de los terratenientes de Fyvie. En varias ocasiones, una oscura figura de un hombre alto, ha sido visto por los muros del castillo, pero desaparece cuando se acerca a ellos.